Con mucha frecuencia no sabemos manejar nuestro dinero, lo gastamos sin medida, gastamos dinero que tenemos contemplados para otras cosas.

En este post te comentamos los errores más frecuentes que cometemos y que es muy importante que los evitemos.

Para empezar, las compras impulsivas:
Muchas veces vamos a un centro comercial solo para pasar el rato o “a babosear” solemos decir. Decimos que no vamos a comprar nada, solo mirar para desaburrirnos. Pero ¿que pasa? Resulta que después de unas horas salimos con tantas cosas que obviamente no estaban planeadas y que mágicamente en ese momento decimos que nos hacen falta. Como alimentos que nada más probamos y ahí se quedan, o ropa que en realidad no necesitamos, etc.

Otro error que cometemos es el de dejar reparaciones fáciles o pequeñas del hogar o del carro para el futuro, sin pensar que eso nos puede salir más caro después.
Como ejemplo, en lugar de ajustar solo una banda en la lavadora para prevenir un problema mayor, lo dejamos pasar, y resulta que después de un tiempo la banda se rompe y causa un daño severo, por el cual debemos desembolsar más dinero.

El no pagar a tiempo las tarjetas, los recibos de servicios, etc. Es un error muy común en muchas familias, esto nos afecta porque por ejemplo: si no pagamos la luz a tiempo y nos la desconectan, resulta que, cuando por fin vamos a pagar la cantidad que corresponde, además debemos pagar la reconexión.

El planear cosas con dinero que no tenemos es un gran error que cometemos. Es decir, planeamos algún viaje o que compramos algún equipo electrónico y decimos a ver de donde sacamos… Al final resulta que tuvimos que pedir prestado para pagar esa deuda del momento, pero nos hacemos de otra más grande.

Debemos pensar antes de actuar, ya que estos errores nos salen más caros por el hecho de estar pagando intereses, o pagando extras.